La historia de la Cuaresma nos puede explicar un par de cosas.
En primer lugar, la Cuaresma aparece claramente celebrada en el siglo IV. Estaba basada en las cuaresmas de Moisés (Éxodo 24,18), Elías (1 Re 19, y Jesús (Mc 1, 12-13), pero se debe saber que el objetivo no era celebrar la «resurrección» de Cristo, sino su «sacrificio» en la cruz para la salvación del mundo.
- La hipótesis es que este tiempo nació (núcleo histórico) a partir de a partir de un ayuno de origen apostólico que servía de preparación para la pascua anual.
- La segunda fase fue a principios del siglo V, cuando se incluyó en la celebración pascual la sepultura y la resurrección del Señor, formando así lo que hoy conocemos como Santo Triduo Pascual.
Esto indica que la cuaresma debía terminar el Jueves Santo; si esto era así, quería decir que la cuaresma había comenzado seis domingos antes (1ª domingo de cuaresma).
- La tercera fase fue cuando los Padres pensaban que estos días debían ser un de intensa penitencia, pero que en los domingos se tenía que disminuir el rigor cuaresmal, aunque formarán parte de este tiempo litúrgico.
- La cuarta fase consiste en que el término Pascua se empezó a usar como sinónimo de Domingo de Pascua, por tanto, el Viernes y Sábado Santos fueron incorporados a la cuaresma…
Esto provocó una Cuaresma de 40+2=42 días, pero con el tiempo se infirió que los domingos cuaresmales no contaban, porque no eran días de ayuno, quedando entonces con una Cuaresma de 42-6=36 días…o lo que es lo mismo 6×6=36 días…
- La quinta fase fue cuando a partir de la mitad del siglo V nace una preparación precuaresmal del miércoles y el viernes antes del primero domingo de cuaresma, lo que se terminará convirtiendo en un periodo de ferias de cuaresma (de Miércoles de Ceniza a Sábado después de Ceniza), por ende un cálculo de 36+4=40 días (de Miércoles de Ceniza a Sábado Santo). (Hay que señalar que esto tardó siglos en ser aceptado).
Ahora bien, San Pablo VI mandó en 1970, en la Carta Apostólica «Mysterii Paschalis», que el tiempo de Cuaresma iría desde el Miércoles de Ceniza hasta la Misa de la Cena del Señor, exclusive.
Esto para recuperar el sentido del Santo Triduo Pascual. Por lo que hoy nos ha quedado una Cuaresma (litúrgica) de 40-2=38 días.
Conclusiones:
1. Desde el punto de vista histórico, podemos hablar de una Cuaresma penitencial. Esta se puede calcular desde los días de ayuno que hay antes del Domingo de Resurrección, o sea desde el Miércoles de Ceniza hasta el Sábado Santo. De esta manera salen 40 días, porque se descuentan los domingos.
2. Desde el punto de vista estrictamente litúrgico, la Cuaresma tiene 44 días, porque contamos de corrido desde el Miércoles de Ceniza hasta el Jueves Santo.
3. Si hacemos una combinación de los dos cálculos, es decir, descontando a la Cuaresma litúrgica los domingos, nos da una cuanta de 38 días.
En todo caso, la Cuaresma debe ser considerada de manera cualitativa, no cuantitativa, porque es un tiempo (Kairós) de preparación interior, conversión y renovación para celebrar la pascua litúrgica y la definitiva la final de nuestra vida.
Tomado del muro de la Congoja Litúrgica (fb)
(Fuente: Mario Righetti, Historia de la Liturgia, Tomo I)
